La carrera de Rod Cousens en la industria del software empezó hace 6 años cuando fue nombrado director gerente de Quicksilva. Esta fecha coincidía con el comienzo en el Reino Unido del «boom» del microordenador. En dos años Quicksilva se convertiría en lo que algunos dieron en considerar la empresa número uno de software de Europa.
El éxito de Quicksilva pasó desapercibido y en 1984 fue vendida a Argus Press. Nick Lambert y John Hollis eran los dos accionistas mayores de la compañía, ambos de aproximadamente 30 años de edad. La venta de Quicksilva les posibilitó jubilarse y les forzó a salir del país con el fin de evitar impuestos, uno se retiró a una isla de la Mancha y el otro a las Bahamas.
Hace 12 meses Rod empezó a trabajar para Activision Inc., una compañía americana, y simultáneamente creó una compañía propia: Electric Dreams ltd. Ahora, Rod comparte su trabajo entre las oficinas de Londres, Southampton y Los Angeles. Le entrevistamos en las oficinas de Electric Dreams en Southampton.
—¿Cuál fue el objetivo de tu reciente visita a España?
—Fui a España con el objeto primordial de conocer personalmente las actividades del mercado, de evaluar la extensión del mismo y de trabajar con nuestros distribuidores. Además vemos a España como un terreno en el futuro para innovaciones y novedades, como ha quedado demostrado en el pasado, por varias compañías. Lo que intentamos hacer es atraer a las compañías españolas con la idea de firmar acuerdos concesionarios con nosotros para el Reino Unido, que obviamente es el mayor mercado de Europa.
—¿Quién es vuestro distribuidor en España?
—Proein, S.A.
—¿Cuál es tu opinión sobre el estado del mercado en España?
—Entiendo que la piratería domina aproximadamente el 80 por 100 del mercado total, lo cual es preocupante. Por otro lado, es de señalar el éxito del MSX, lo cual hace a España uno de los mercados más importantes de Europa para esta máquina en particular. Y por supuesto la influencia de Amstrad. España ha sido un fuerte mercado de Sinclair y puede que continúe siéndolo, con el lanzamiento del nuevo Amstrad Spectrum.
—¿ Cómo se encuentra el mercado español con respecto al inglés?
—El mercado español está dominado por el Z80, con cierta influencia de Commodore. El mercado inglés está mucho más distribuido y repartido entre Commodore, Sinclair y Amstrad, con bastante atención actualmente hacia Amstrad y su previsto lanzamiento del ordenador compatible IBM PC.
—¿Cuántas copias de un juego necesitas vender aquí, en el Reino Unido, para poder cubrir gastos?
—Eso varía de un programa a otro. Por ejemplo, si hemos planeado lanzar un producto con el respaldo de un personaje famoso, o con el soporte de una película famosa, entonces necesitamos un número más alto de copias. Cada título difiere en cuanto al coste de adquisición de ese título en particular.
—¿En qué ordenadores concentráis mayormente vuestros esfuerzos?
—No nos concentramos necesariamente en el mercado inglés; como compañía tenemos una política global, lo cual quiere decir que nuestras mayores cifras de ventas se consiguen a través del Commodore y del Amstrad, pero aquí en el Reino Unido, Sinclair sigue siendo una fuerza importante. Por consiguiente, prestamos gran atención al progreso de los distintos ordenadores en distintos territorios, antes de decidir el formato sobre el cual se lanzará un producto.
—Actualmente llevas dos compañías: Electric Dreams y Activision Europa, ¿cómo consigues combinar estas actividades?
—Las dos corren paralelas; además Electric Dreams fue creada como una rama de Activision con objeto de promocionar productos locales para los territorios europeos, en lugar de depender única y exclusivamente de la compañía madre en los EE.UU. para proporcionar todos los productos originarios.
—Sin embargo, vosotros no escribís software personalmente, ¿no? Sois simplemente una compañía editora.
—No, eso no es cierto. Ambas compañías tienen equipos internos de investigación y desarrollo. En California tenemos unos 60 programadores a nuestra disposición, y en el Reino Unido hemos creado un grupo de desarrollo de software que también trabaja de cerca con programadores individuales y otras compañías de diseño e investigación.
—Esta debe de ser una época del año de mucho trabajo.
—Sí, no hay ninguna época que se pueda llamar de poca actividad, pero durante los meses de verano la carga de trabajo llega a alcanzar su máximo, ya que es cuando nos preparamos para asaltar el mercado de navidad.
—¿Qué productos tenéis pensado lanzar en un futuro próximo?
—En la feria de PCW hemos tenido 14 productos en exhibición por parte de Activision y 8 por la de Electric Dreams. La gama de productos de Activision incluye lanzamientos de grandes títulos cinematográficos como «Howard the duck» de Steven Spielberg y George Lucas, «Laberinth» con David Bowie, así como otros productos originales que hemos desarrollado en California. También tenemos uno de los productos más excitantes que se han lanzado en mucho tiempo, llamado «Hacker 2», la segunda parte de «Hacker». Electric Dreams también presentará grandes títulos como «Aliens» que está siendo gran éxito de taquilla, y «Big trouble in little China». Además, uno de los clásicos juegos arcade de todos los tiempos: «Star raiders». Nuestro catálogo es extenso porque también liemos obtenido licencia de «Enduro Racer» de Sega, «Supersprint» de Atari y habrá más a primeros de año.
—¿Por qué crees que los ingleses compran ordenadores?
—Creo en los ordenadores como una forma de diversión; además estoy convencido de que la industria de software es una mera extensión de la industria de discos y películas.
—¿Cuánto tiempo crees que seguirás trabajando en esto?
—No soy de la opinión de que los ordenadores personales se separan del mundo de la diversión; creo que la tecnología cambiará, y que si nos movemos en áreas como las de discos compactos se confirmará con más fuerza aún que el sector de diversión continúa teniendo éxito. No olvides que en su punto cumbre el aspecto de diversión del mercado alcanzó un asombroso 80 por 100 y nunca ha caído por debajo del 50 por 100. Aunque prestamos atención y, nos movemos en otros sectores del mercado, no veo razón para que el ocio no siga siendo nuestra mayor fuente de ingresos.
—¿Crees que el software se seguirá vendiendo en su formato actual?
—De momento no parece haber mucha alternativa, pero debemos perseguir un medio que resista la piratería ya que las casas de software están teniendo grandes pérdidas debido a ese factor. Debes comprender que si un programador ha pasado 12 meses de su vida desarrollando un producto que el considera una obra de arte, y seguidamente este es copiado ¡legalmente, entonces ¿qué incentivo tiene para continuar produciendo buenos y originales productos?
—¿Conoces MICROHOBBY?
—Sí, tengo conocimientos sobre la influencia de MICROHOBBY en España. Creo que es una revista interesante, parece dirigirse a una vasta gama de usuarios, y sigue con éxito los números uno del Reino Unido.
—¿Qué representan los próximos 12 meses para Activision y Electric Dreams?
—Somos muy optimistas; es interesante conocer las nuevas corrientes del mercado. Actualmente hay proliferación de impresoras y unidades de disco, lo cual aumentará la sofisticación de los productos. Y por supuesto observamos con gran interés y entusiasmo la expansión de los IBM compatibles; por lo tanto, veo grandes oportunidades en el futuro.
—También has participado en obras benéficas. Háblanos de ello.
—Creo que nuestra industria y nuestros clientes tienen la obligación de ayudar a los menos privilegiados del tercer mundo. Y así, después del éxito de Bob Cieldof y su «Band aid», decidimos lanzar «Soft aid», que es una cinta de copilación compuesta de 10 títulos con distintos sistemas y con fines caritativos. Generó 300.000 libras para las víctimas del hambre en Africa. En este momento, estamos intentando repetir este éxito con el lanzamiento de «Off the hook»: todos los beneficios de esta cinta serán para la lucha contra la adicción a la droga en este país.
—¿Con quién has contado en este proyecto?
—Con la mayoría de las casas de software inglesas, como Activision, Ocean, Melbourne House, Elite, Firebird y muchas otras. Han confeccionado un programa para la cinta y a su vez los mismos programadores han cedido sus derechos de autor. También hemos contado con los mayores distribuidores del Reino Unido, y no hay razón para que alguien en España no se haga cargo de un proyecto que provee al consumidor con una ganga, mientras que soporta una causa tan noble.
—¿Qué programas han representado vuestros mayores éxitos?
—En Quicksilva «Ant attack» y «Bugaboo», este último creado en España por Indescomp. Antes de mi llegada a Activision tuvieron el mayor éxito sencillo jamás conseguido por una compañía de software con «Ghostbusters». Este éxito fue seguido por «Hacker», «Back to the future», y «Spindizzy», el juego más interesante del año pasado.
—¿Qué otras subdivisiones entran en el abanico de Activision?
—Una de las cosas en que hemos invertido ha sido en nuestra propia facilidad de distribución, en donde tenemos subdivisiones como el «System 3», que lanzó uno de los mayores éxitos de verano: «International karate»; y un editor francés llamado Larisielle. Dicho de otra manera, nosotros promocionamos sus productos, su imagen, y su nombre comercial en el mercado británico, les llevamos a cabo las funciones de ventas, de distribución y de financiación. Por supuesto estaríamos dispuestos a hacer algo similar para una compañía española, y, como dije antes, consideramos a España como mercado interesante, teniendo en cuenta la calidad de los productos que allí se crean; y en mi reciente viaje a España me resultó interesante conocer compañías nacionales como Dinamic.
—Muchas gracias, y buena suerte en el futuro.