En abril de 1989 la revista Amstrad Ocio Sinclair valoró el juego Pac-mania para Amstrad CPC, veamos qué se dijo.
La primera generación de comecocos fue sin duda la más emocionante, en esta debíamos derrotar a nuestros incansables perseguidores, comiéndonos todos los puntos de cada laberinto. Claro está, teníamos nuestra ayudita, la de los puntos parpadeantes, que al comérnoslos hacían que el enemigo huyera; pero esto tenía su dificultad y es que según íbamos pasando niveles la velocidad del enemigo crecía, mientras la nuestra seguía igual.
El fallo anteriormente citado hizo aparecer una segunda generación de comecocos, los cuales sólo variaban de la primera en que llevaban un botón de aceleración en nuestro Pac-man, lo que hacía que el juego estuviera más equilibrado en fuerzas.
Y así ha pasado el tiempo, hasta nuestros días, los ordenadores han cambiado, y los gustos también, el comecocos se sigue utilizando pero ya en un segundo escalón. En los juegos ya se conocen las tres dimensiones y las máquinas recreativas están llenas de monigotes, karatekas, coches, aviones, etcétera, todos ellos bien realizados, con unos efectos sonoros estupendos (y ya nadie se acuerda del antiguo Pac-man).
Pero un buen día traen una máquina nueva al salón recreativo, con la impaciencia de los allí asistentes, la montan y lista para jugar. La gente se queda estupefacta por la carcasa, y se oyen rumores -pero si es un comecocos-, el empleado da al interruptor de encendido y algo sorprendente ocurre: un comecocos aparece saludándonos y nos invita a introducir una moneda. Un asiduo de las máquinas y conocedor del antiguo comecocos quiere jactarse ante sus amigos, introduce la moenda y la partida da comienzo. Sale el decorado y he aquí la sorpresa. Está realizado en tres dimensiones, con unos gráficos maravillosos, una velocidad estupenda y una música que es algo escalofriante. El asiduo jugador no da crédito a sus ojos, cuánta similitud y cuánta diferencia al mismo tiempo. El caso es que no pasa del primer nivel.
Las avispadas compañías de software pronto se lanzan a realizar la esperada conversión y rápidamente se lanzan a la exclusiva. Esta vez es Grandslam la que se encargará de hacer la conversión para los ordenadores. Empieza con una muy buena conversión para ordenadores grandes, y luego se pasa a los pequeños (máquinas de ocho bytes), aquí está nuestro Spectrum, Amstrad, y demás...
El juego consta de siete niveles divididos en uno para novatos, dos medios, dos altos y dos extralimitados. Pac-man esta vez está en una ciudad y quiere recorrerla.
Nivel uno (novicios):
Pac-man sale dispuesto a todo, y sus enemigos se encuentran aún dormidos, lo que hace que se pueda recorrer las calles por las aceras, tranquilamente, recogiendo su alimento favorito (piedrecitas).
Niveles dos y tres (jugadores de grado medio):
Esta vez Pac-man llega al parque. Aquí sus enemigos ya están algo más espabilados, y le van pisando los talones, pero tampoco sin grandes dificultadas, lo que hace que pueda seguir comiendo.
Nivel cuatro y cinco (jugadores buenos):
Ahora quiere ir al teatro y lo hace desde el parque, pero cuidado, sus enemigos ya no son tontos y realizan grandes saltos; suficiente potentes como para darnos caza.
Niveles seis y siete (jugadores superdotados):
Pac-man sale del teatro y se dirige a la gran jungla de hierro (ciudad), claro está, comiendo sus piedrecitas que tanto falta le hacen. Aquí todos sus enemigos son extremadamente peligrosos.
Con una buena utilización de las píldoras milagrosas, un poco de habilidad, buenos reflejos, muchas horas jugando, gran práctica en los saltos y tiempo para jugar, yo estimo que podréis acabaros este último nivel; ¡las sorpresas son sólo para los vencedores!
Este juego es una buena conversión de la máquina, está realizado en mode 1 utilizando muy bien los colores, lo que hace que el juego sea vistoso. La rapidez es algo primordial en un comecocos y aquí han conseguido dársela.
Creado por: Gramslam
Distribuido: Zafiro Software
Lo mejor: Es un comecocos innovador
Lo peor: Es un poco lento
Sonido: 6
Gráficos: 7
Adicción: 7
Nota media: 7