De los programadores españoles que trabajan para el Spectrum, Víctor Ruiz es, sin lugar a dudas, uno de los más prolíferos de todos. Artist, Saimazoom y Babaliba avalan su trayectoria de éxitos.
Víctor, como el resto de los programadores que se dedican actualmente al Spectrum, empezó con un ZX 81. «Me lo regalaron y casi sin mirar el manual me puse a teclear.» Sus primeros intentos en este campo pronto empezaron a dar sus frutos, «lo primero que hice fue un Asteroide, porque el que había para el ZX 81 era bastante malo. Después hice uno de coches y alguno más que dejé sin terminar».
El principio
En compañía de sus hermanos se puso a trabajar. A todos ellos, como el propio Víctor dice, siempre les ha gustado mucho más programar que jugar, por ese motivo y guiados un poco por algunos programas que les llegaron desde Inglaterra, deciden crear una primera marca que iba a llamarse NCM, para la cual habían preparado un par de programas. Sin embargo, al poco tiempo surgía DINAMIC como un intento de formar un grupo de programadores, a pesar de lo cual nunca pensaron que llegarían a ser una empresa comercial.
El primer paso fue poner un anuncio en una revista. Cuando lo hicieron, aún no estaba terminado el Artist. «Teníamos muchos programas empezados, el Artist, por ejemplo, era solo un montón de rutinas sueltas, de gráficos. A mi no se me había ocurrido nunca unirlas, pero como ya teníamos el Yehngt empezado y estaba bastante bien, decidí unir todo lo del Artist y al final lo acabamos, casi un poco presionados por haber puesto el anuncio.»
Los primeros pasos de Dinamic son más bien duros, como empresa independiente ellos se lo guisan y ellos se lo comen. «La idea era hacerlo todo nosotros, vendíamos los programas muy baratos y corríamos nosotros con todos los gastos y con todo el trabajo. Los grabábamos, poníamos las carátulas, nos ocupábamos de la imprenta, todo. Al principio, a pesar de que el anuncio que pusimos era muy malo, tuvimos bastante aceptación.»
Saimazoon
Saimazoom es el primer gran éxito de Dinamic y de Víctor Ruiz, quien compagina sus estudios con la creación del programa. Al parecer tardó bastante en decidir lo que iba a hacer, «tenía sólo un mes pura hacer el programa. Al principio pensaba hacer una especie de "Pengo", pero finalmente surgió lo de Saimazoon, quizás influenciado un poco por los anuncios de televisión del café, que en aquellos momentos lo pasaban insistentemente. Pensaba hacer una sola pantalla, pero después vi que no era demasiado liado lo del mapeado y me puse con ello. Diseñé una selva en grande con todos sus detalles y después me dediqué a diseñarla. El personaje de Johny Jones fue lo que más me costó diseñar. Y lo hice conjuntamente con Santi». El personaje, en un principio, iba a ser un jeep, pero finalmente, se creó este otro que, como dato curioso, hay que decir que se empezó a dibujar por el gorro. El juego logró acabarse en un mes, para lo cual Víctor tuvo que quedarse prácticamente sin dormir más de un día. «Era la única forma de conseguirlo. Es como más se avanza, aunque te acuestes por la mañana, dedicarle mucho tiempo seguido es el único modo de meterse de lleno en el programa.»
Con un Spectrum, un cassette y un televisor en blanco y negro como únicos medios, se obtienen los primeros resultados. El hecho de no disponer de color influye de alguna forma en sus primeras creaciones. Como es lógico, Víctor también se siente preocupado por la protección de sus programas, por eso se pone en contacto con un amigo, Alberto Poveda, y crean la primera rutina de carga rápida, que será, a partir de ese momento, el principal sistema de protección utilizado por Dinamic. Este método fue usado además de como sistema antipirata, como una forma más cómoda de conseguir cargar un programa reduciendo bastante el tiempo de carga.
Babaliba
Tras Saimazoon llegaría Babaliba, un programa mucho más complejo que el anterior y que además es la segunda parte de éste. El programa se realizó en verano y, en esta ocasión, se cuidaron mucho más los detalles gráficos y el mecanismo general de la aventura. «Pablo hizo un mapa y nos pusimos a trabajar con él.»
Víctor, al contrario que otros programadores, ha trabajado casi siempre en equipo y esto es algo que se nota en todos sus programas, donde los detalles se cuidan bastante y la presentación está siempre muy elaborada.
Babaliba es un programa fruto de una estrecha colaboración de los miembros que colaboran en Dinamic, con el estilo inconfundible de Víctor Ruiz, que, poco a poco, se va afianzando en nuestro país como una de las más jóvenes promesas en el campo de la programación de juegos, y más en concreto, de videoaventuras que es, sin lugar a dudas, el terreno que mejor domina.
Nuevos proyectos
En la actualidad Víctor trabaja en su nuevo proyecto, Profanation, un programa que empezó su hermano Nacho y para el que se crearon unos gráficos que parece ser superan en mucho a los de los programas anteriores. «Lo empezó Nacho junto con el Videolimpic, pero luego se quedó un poco colgado, por eso lo he retomado yo porque él tiene ahora otras ideas, y a mi me daba pena desperdiciar todos los gráficos que se habían empezado a diseñar, los cuales están muy elaborados. Vamos a meter además Sprites. Va a ser un juego atómico.»
Además de este proyecto, Víctor prepara una gran sorpresa para las Navidades del 85. Cuando le preguntamos por esto, no quiso adelantarnos nada. «Va a ser algo totalmente secreto hasta que salga.»
Dinamic ha evolucionado en este tiempo y, como es lógico, los medios de los que dispone Víctor ahora son también mucho mayores, como sus proyectos, que cada vez son más ambiciosos. En un futuro, incluso, se ha llegado a pensar en la posibilidad de trabajar también para otros ordenadores. «Estamos metiéndonos con otros ordenadores poco a poco, a ver si sacamos algo para los MSX, aunque aquí en España, todavía no hay muchos, al contrario que en Inglaterra que tienen mucha salida.»
La situación del Software en España es algo que preocupa a todos los programadores, la creación de un mercado potente en nuestro país va siendo poco a poco un hecho, y como era de imaginar, Víctor también opina del tema. «Hay pocos programadores, pero muy buenos. El Fred y la Pulga son programas que han calado muy hondo en Inglaterra. Nosotros esperamos tener la misma suerte.»
En Dinamic se cuida mucho la presentación de los programas. Víctor es partidario de dedicar mucho tiempo a confeccionar pantallas, puesto que eso va a influir de alguna forma en la calidad final del producto. La de Babaliba, por ejemplo, tardó en hacerse alrededor de treinta horas, lo que demuestra, sin lugar a dudas, una buena disposición de Víctor a crear productos de calidad.
La nueva obra está siendo cuidada al detalle por sus creadores en este sentido. «La del Profanation es la que más hemos trabajado de todas, espero que sea un golpe para todos. Además, al igual que hicimos con el Babaliba, la vamos a grabar al final del programa para poder sacarla por impresora. Se ha confeccionado sólo en un color y hemos tardado también unas treinta horas en terminarla.»
Un programador con futuro
En definitiva, Víctor Ruiz es un joven programador con mucho futuro que, a pesar de tener tan sólo 19 años, ya ha incluido su nombre entre los mejores programadores de este país. Su casa de Software favorita es Software Projects, aunque piensa que los programas de Ultimate son ahora mismo los mejores. Su programa inglés favorito es el Knight Lore, mientras que el español es el Fred, al que considera un programa más de su estilo, aunque por supuesto, cuando le preguntamos no pudo olvidarse de «La Pulga».
Bebe Coca Cola y come de todo, su grupo de música es Golpes Bajos y le gustan mucho las películas de Indiana Jones, personaje en el cual está basado el héroe de sus programas.
Es, en definitiva, un joven programador con mucho futuro por delante, que se ha creado su propio estilo, el cual imprime en todos sus programas. Que su ejemplo sirva para que otros se animen a seguir sus pasos y, poco a poco, lleguemos a crear en España un mercado tan importante como el anglosajón.
Material, ganas y buenos programadores hay para ello, además de un público que cada día va tomando más conciencia de cuáles son programas de calidad y cuáles no.
Suerte Víctor.