Juego: Sir Fred
Spectrum 48K
Made in Spain
Programadores: Carlos Granados Martinez, Paco Menendez, Fernando Rada Briega, Camilo Cela Elizagarate, Juan Delcan
Por fin parece que, poco a poco, los creadores de software españoles están comenzando a despertar de un largo letargo, que los buenos programadores están dejando de ser unos cuantos casos aislados y que, definitivamente, se están empezando a crear buenos productos.
Evidentemente tampoco hay que echar tas campanas al vuelo, pues está claro que la producción de juegos en nuestro país resulta, desde todo punto de vista, ridícula y escasísima, si la comparamos con la de otros países europeos.
Sin embargo, parece que las cosas empiezan a funcionar. Y un buen ejemplo lo tenemos en el caso de Made in Spain (simpático nombre), que tras el éxito obtenido con su anterior programa, Fred, vuelven a acaparar la atención de todos con una excelente creación: Sir Fred.
Aquella su primera obra fue, sin duda alguna, uno de los mayores éxitos del software español; pero por otro lado, también se veía que era eso, el primer juego que realizaban, y se podía apreciar en él una cierta falta de madurez. Pero ahora todo esto ha quedado atrás. Con Sir Fred, se nota perfectamente la experiencia adquirida y un mayor dominio de las técnicas de programación. Evidentemente se ha realizado un programa que supera ampliamente al anterior.
Aquellos jóvenes y tímidos «muchachos del Fred», se han convertido en los señores de Made in Spain.
Pero dejemos a un lado todas estas cuestiones metafísicas y transcendentales y centrémonos en el tema que realmente nos interesa, en Sir Fred.
Y las primeras cuestiones surgen por si mismas: ¿quién es Sir Fred? ¿qué es lo que pretende? Pues Sir Fred es un auténtico caballero, de ésos que ya se ven pocos por el mundo. A pesar de que su físico no le acompaña demasiado, pues es gordito, calvo y posee un nada despreciable apéndice nasal, sus virtudes como persona son verdaderamente excelentes: valeroso, aguerrido, incansable defensor del bien, luchador sin par y gallardo como pocos. En cuanto al asunto que le trae por aquí, es fácil de adivinar. ¿Qué es lo que puede mover a un caballero a realizar las más osadas proezas y embarcarse en las más peligrosas aventuras? Pues evidentemente el amor de una dama.
En cuanto llegó a sus oídos que su bella amada había sido raptada y que se encontraba encerrada en el castillo de los malvados Beni-Gómez, corrió sin perder un instante, y sin más armas que su ira y su arrojo, a intentar un arriesgado rescate.
Pero el castillo no es precisamente un convento de hermanitas de la caridad. En él se encierran todos los peligros que se puedan imaginar y algunos más. No, desde luego que no le va a resultar nada fácil entrar en el lugar donde se encuentra su amada. Para ello deberá realizar todo tipo de peripecias y enfrentarse a un sin fin de animales, trampas y enemigos, ¿y qué es lo que puede hacer para evitar estos inconvenientes?, os estaréis preguntando en estos momentos. Pues de todo, muchachos, de todo: caminar, saltar, escalar por las enredaderas, balancearse en cuerdas y lianas, pelear con espadas, nadar, disparar flechas, y un gran número de acciones diferentes. Pero sobre todo, lo que más falta le hará será utilizar todo su ingenio y astucia para lograr que los objetos que se vaya encontrando por el castillo (sogas, espadas, arcos, botellas, cerillas, etc.), le sirvan de alguna utilidad y poder ir abriendo nuevos caminos para llegar a tan anhelado fin.
Pero como ya os hemos dicho, esta tarea le va a resultar extremadamente complicada y quizás éste sea uno de los pocos defectos que le encontramos al juego: el hecho de que para conseguir ir pasando de pantalla tienes que calentarte demasiado la cabeza: aunque posiblemente este sea uno de los detalles que hagan que cojamos un mayor interés por él (sobre gustos...).
Sin embargo, lo más atrayente del juego es, sin duda, sus gráficos. Estos están realizados con una auténtica vocación artística y cada una de las pantallas está llena de figuras y colores, que nos sitúan en escenarios completamente diferentes, por lo que el resultado es, cuando menos, brillante en la mayoría de las ocasiones.
Y de los movimientos, pues qué os vamos a decir. Si los gráficos son buenos, éstos son aún mejor.
A parte de la gran cantidad de acciones que puede llevar a cabo y que anteriormente os hemos comentado, éstos están hechos, entre otras cosas, con realismo y con humor. Por tanto, ésta es una nueva virtud que tenemos que añadirle al resultado general del programa.
Aunque justo es decir, que no hay nada perfecto, pues tanto lujo de detalles en la pantalla se paga con una presentación un tanto pobre, pues los indicativos de la vida y de los objetos llevados quedan algo sosos en relación al resto de la pantalla. Pero bueno, esta es una circunstancia que no tiene ninguna transcendencia y que puede ser totalmente pasada por alto.
En definitiva, Sir Fred es un juego muy bueno en todos sus aspectos y esperamos que los señores de Made in Spain se vean animados con esta creación a seguir realizando nuevos programas, al menos tan simpáticos y entretenidos como éste.
