Videojuego: Crystals of Arborea
Sistema: Commodore Amiga 500
Silmarils
Programación: Michel Pernot
Gráficos: Pascal Einsweiler
Música: Fabrice Hautecloque
1990
Cristals of Arborea, es un entretenido juego que en su planteamiento nos recuerda mucho la historia del "Hobbit" y sus correrías por la tierra media. En este caso los dioses destruyen el mundo por que uno de ellos convence a los elfos negros y a los orcos para que se unan a él y controlen el mundo con maldad. Toda la tierra queda completamente hundida en el mar a excepción de una pequeña isla en la que se desarrolla el juego.
Cuatro cristales, cada uno representando a un poder terrenal, son los que los dioses dejaron en la tierra. Uno pertenece al agua, otro al fuego, otro a la tierra y el último de los cristales al cielo, todos juntos crean el orden terrestre. LOs cristales están ahora en poder en poder de los elfos negros y los orcos y hay que recuperarlos para que "arborea" no sea totalmente destruída y caiga en el caos.
El protagonista de la búsqueda de los cristales es Jarel un inexperto muchacho pero con mucha intuición, y valía, junto a el tres caballeros, dos arqueros y un mago intentarán lograr su objetivo y finalmente se enfrentarán con la maldad del dios expulsado por sus semejantes.
El movimiento de los personajes se realiza sobre un plano de la isla, estos movimientos por la isla son muy rápidos pudiéndose recorrer ésta en pocos minutos si no fuese por los continuos enfrentamientos con los enemigos, los diferentes personajes pueden moverse juntos o por separado, y sólo el protagonista es controlado directamente sobre el plano tridimensional. Cuando los enemigos interceptan a Jarel o al grupo existen dos posibilidades aceptar el desafío o huir, en el caso de huida es posible que de todas formas sean alcanzados. El combate es bastante difícil de controlar por el relativo poco manejo que se tiene sobre el personaje. En realidad son los combates lo que más decepciona del juego por la relativa forma de ganar o perder que en ellos se tiene.
Durante el juego en 3D, Jarel que es el personaje controlado, tiene la posibilidad de avanzar en todas direcciones y ver a los otros participantes así como a los atacantes. Pero realmente para que el juego guste no hay que dejarse llevar por la primera impresión sino intentar llegar lo más lejos posible en la dificultad general donde el juego realmente engancha y cuando empieza a notarse las diferentes estrategias que podemos seguir y sus resultados.
