La revista Input Commodore comentó el juego Beach Head II para Commodore 64, veamos qué se dijo del juego.
Tenemos ante nosotros un juego de guerra, aunque no tiene nada que ver con la estrategia, los movimientos de tropas, etc. Unicamente se trata de cruel y encarnizado combate. El subtítulo reza: “El Dictador ataca de nuevo”, o, lo que es igual, buenos contra malos.
Repasemos la trama. El Dictador ha capturado como rehenes a las tropas enemigas. Lograr su rescate es el desafío.
En la pantalla de presentación aparece el helicóptero que nos introduce en la primera parte. Bajo él un breve menú en el que elegir uno de entre tres niveles de dificultad. Igualmente puede optar por uno o dos jugadores; es decir, que puedes perfectamente ser tú el Dictador que intenta la derrota de las tropas aliadas, encabezadas por tu padre o hermano.
Para intentar el rescate de las tropas recluidas se lanzarán las fuerzas paracaidistas desde el helicóptero, durante esa primera fase del juego.
Uno enorme y destructivo cañón amenaza a los paracaidistas, escondidos tras un muro después de su toma de tierra. Una brecha en el primer muro te permitirá llegar a otro más próximo al cañón, primer objetivo que debes ser alcanzado para entrar a la fortaleza. El peligro de salir a campo abierto es el consabido de estar a merced de los proyectiles de la artillería del Dictador, los cuales habrá que burlar. Los supervivientes, si los hay, habrán de tomar finalmente el cañón y neutralizarlo. Por tanto la misión de estas fuerzas de choque es fundamental. La estrategia empleada
consiste en que los hombres salen por parejas, el primero procura atraer el fuego sobre si, mientras el otro lanza una granada y sale corriendo hacia un lateral para esquivar los disparos.
Cubierto el primer objetivo, llegamos a la segunda pantalla en la que el resto de la tropa debe atravesar el patio de la fortaleza.
Con el cañón recién tomado al enemigo, cubrirás el ataque de tus hombres. Es imprescindible aniquilar a los cuatro adversarios que oponen toda su resistencia contra el avance. El más peligroso es uno que se esconde tras una trampilla móvil por todo su recorrido. Se desplaza con enorme rapidez y continuamente sale un enemigo que dispone bombas a dos pasos de tus hombres. Por ser el más conflictivo es el primer adversario que debes eliminar.
Siguiéndole en peligrosidad está un automóvil que te persigue implacablemente y una vez alcanzado te desintegra sin piedad.
Los dos últimos obstáculos son un tanque, que intenta aplastarte mediante el atropello, y un soldado escondido tras las murallas que dan al patio, por donde lanza mortíferas bombas.
Si logras llegar a la tercera fase, debes elegir un ruta de escape.
Pilotas un helicóptero, te persiguen misiles, te atacan desde bunkers, desde trampas escondidas en el suelo lanzan pelotas. Un sinfín de peligros te obstaculizan la entrada a la madriguera del Dictador. La cuarta etapa es un enfrentamiento personal entre dos líderes: el comandante Striker y el Dictador. En una gruta les separa un precipicio por el que avanza el curso de un río. Entonces hablan los cuchillos, que se lanzan mutuamente ambos contendientes con la intención de dar muerte al otro. El vencido cae y es arrastrado por los frías aguas del río, no sin antes dar un espantoso grito inhumano, que guarda gran semejanza con el que produce el agente de otro juego, Misión imposible, cuando cae al abismo.
No hemos mencionado aún que este juego dispone de una serie de gritos que lanzan los hombres, un conjunto de unas treinta palabras y frases distribuidas por todo él; por ejemplo, cuando un soldado cae abatido por un proyectil grita. “Me han disparado”, eso sí, en inglés.
Aunque el juego no aporta nada nuevo del otro mundo en cuanto a los gráficos, la emoción está asegurada.
Título: Beach Head II
Fabricante: Access Software INC
Ordenador: Commodore 64
Memoria: 64K
Clase de programa: Juego de guerra
Gráficos: 3 sobre 5
Color: 3,5 sobre 5
Presentación: 3 sobre 5
Interés: 4,5 sobre 5
Realismo: 3,5 sobre 5
