En abril de 1989 la revista Amstrad Ocio Sinclair valoró el juego Barbarian para Amstrad CPC, veamos qué se dijo.
En el país de la fantasía, en donde habitan los monstruos, magos y dragones, transcurre la feliz infancia del pequeño Hegor. Su padre, Thron, le enseña el arte de la caza y el amor a su pueblo. Sin embargo, pronto termina la paz. Un día, al regresar de un paseo, ve que su aldea está siendo atacada por un gigantesco dragón. El fuego arrasa las chozas y, en medio de la humareda, ve cómo se padre se enfrenta al enemigo con valor y coraje. Corre para ayudarle, pero cuando llega todo ha concluido, su felicidad y su último suspiro de Thoron. Allí, frente al dolor y la muerte, jura que no descansará hasta haber vengado a su casta y a su gente. Por tanto, vuestra misión es recorrer este orbe mágico plagado de peligros, llegar a la guarida del maligno, destruir el cristal fuente de vida para él y poner pies en polvorosa antes de que reviente el subsuelo.
Necron sabe que le buscáis y, para no arriesgarse, ha sembrado el terreno de trampas, desplomes de techos, pasarelas preparadas para no resistir tu peso y, por consiguiente, pegarte un trompazo de muerte, además de otras sorpresas que te aguardan en el camino.
Versión comentada: Amstrad CPC. Los gráficos del juego son grandecitos, con un colorido monótono y bastante simples de trazado. Sin embargo, la movilidad de Hegor es asombrosa: anda, retrocede, corre, salta y da volteretas. Información lleve poca, tan siquiera nos dice qué sirve cada icono, hay que ir aprendiéndolo a medida que vamos seleccionándolos. Un juego sin más pretensiones que distraernos un rato.
Creado por: Melbourne House.
Distribuido por: Dro Soft.
Lo mejor: La agilidad de Hegor.
Lo peor: Poca información.
Sonido: 6
Gráficos: 8
Adicción: 6
Nota media: 6
